Mario Mayán, alcalde del centro poblado de Shaim, distrito de Cenepa, en la región Amazonas, partió el lunes de su comunidad indígena huyendo de las amenazas de muerte que recibía de los militares involucrados en el tráfico de oro en la Cordillera del Cóndor, hecho que denunció en días pasados. Ayer, al llegar a Lima, fue informado de que el titular de Defensa, Allan Wagner, había asegurado que tales militares habían sido relevados. Su primera reacción fue de sorpresa. La noche anterior Mayán se había comunicado con autoridades de Cenepa, las cuales le advirtieron que el comandante José Cossío Mendieta y el suboficial Carlos Palacios Ramírez permanecían en la zona y lo buscaban para tomar represalias contra él por haberlos sindicado como parte de la red que cobra cupos a mineros ecuatorianos para permitir la extracción del oro en el Perú.