En una presentación ante la Comisión de Energía y Minas del Congreso, el contralor Nelson Shack señaló que la Contraloría desarrolla un control integral al proyecto de la nueva refinería de Talara, el cual incluye tres auditorías.La primera de ellas, indicó, es la auditoría de cumplimiento que ya se realizó -y dio a conocer a inicios de setiembre último, en la cual advirtió de un perjuicio al Estado de S/1,115 millones, por el retraso en la contratación de las obras auxiliares que necesita esa refinería.La siguiente auditoría de cumplimiento, indicó el contralor, investigará el desempeño de la nueva refinería, una vez que empiece su operación, y prevén llevarla a cabo a mediados del 2022.