La decisión del Gobierno de buscar renegociar el contrato de Camisea, con la amenaza de que si no hay un acuerdo se procederá a la "nacionalización" del recurso, comenzó a tener impacto en las empresas que conforman el consorcio a cargo de la explotación del gas peruano.La primera en donde se encendieron las alertas fue en Hunt Oil Perú, parte del Consorcio Camisea, junto con Pluspetrol, SK Innovation, Tecpetrol, Repsol y Sonatrach.La calificadora internacional de riesgo crediticio, Fitch Ratings, anunció que colocó las calificaciones de Hunt Oil Perú en "observación negativa".La medida incluye el emisor de moneda local y extranjera a largo plazo `BBB", calificaciones de incumplimiento (IDR) y las notas senior no garantizadas `BBB" por US$ 600 millones con vencimiento en 2028."La observación negativa de la calificación refleja el mayor riesgo regulatorio y político de Hunt Oil Perú debido a la reciente solicitud del Gobierno peruano de renegociar el acuerdo de licencia del Consorcio Camisea", explicó la agencia en un comunicado.