UN GOBIERNO MACHISTA
1 de septiembre de 2021

La denuncia que realizó ayer la tercera vicepresidenta del Congreso, Patricia Chirinos, en contra del actual presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, no debe ser tomada con tibieza. Tampoco, creemos, debe ser vista como un hecho aislado, pues viene a sumarse a otros que, en poco más de un mes, ya han mostrado a este gobierno como uno situado en las antípodas de la lucha por la equidad de género y por la erradicación de la violencia contra las mujeres.Según contó la legisladora de Avanza País en RPP, en julio pasado, ella les pidió a sus colegas de Perú Libre Jaime Quito (que se desempeñaba como titular de la Junta Preparatoria encargada de la instalación de los nuevos congresistas) y Bellido que le permitieran establecerse en la oficina que había tenido su padre, Enrique Chirinos Soto. A su solicitud, sin embargo, le habría seguido una grosera respuesta del segundo: "¿Qué te preocupas de eso? Anda cásate". Y poco después, frente a la réplica de Chirinos (quien le recordó que había sido "soltera, casada, divorciada y viuda"), Bellido habría añadido: "Entonces solo falta que te violen".Por sí sola, la declaración -que Bellido ha negado, pero de la que, según ha dicho la congresista Chirinos, otros legisladores pueden dar fe- es agraviante. Tratándose, además, de un tópico como la violación sexual (que solo entre enero y julio de este año motivó más de 12.000 denuncias en los Centros de Emergencia Mujer del país, según datos del Ministerio de la Mujer), resulta nauseabunda.