Buscando paliar un tanto su indisimulable y generalizada crisis intestina, el Poder Judicial (PJ) empezó ayer a emitir sus primeras luces de modernización. Y aunque las medidas que anunció no son ni por asomo un atisbo de la gran reforma que se espera, sí ponen en evidencia reflejos ante una opinión pública que demanda su total reestructuración.En una de sus resoluciones más importantes, el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial (en su calidad de máximo órgano administrativo del sector) ordenó que se publique en Internet las hojas de vida actualizadas de todos los magistrados, para que la ciudadanía conozca detalles sobre su formación académica.Será la gerencia general la encargada de vigilar el cumplimiento de esta norma que aspira a la transparencia.En otra disposición destacable se ordena la suspensión de las licencias de los magistrados, así como del personal jurisdiccional y administrativo. Con ello se aseguraría la permanencia de los jueces en sus despachos y quedaría garantizada la celeridad de los procesos.Además, se ha dispuesto el estricto cumplimiento de la jornada de ocho horas laborales en todos los órganos jurisdiccionales y administrativos.