El precio del petróleo no tiene cuándo detenerse y el barril Brent apuntó este viernes un valor por encima de los US$ 75, mientras que la referencia estadounidense WTI superó los US$ 73, precios no vistos desde el 2018. Este impulso se debe a una caída mayor de la esperada en las reservas de petróleo estadounidenses lo que, a su vez, ha avivado la expectativa de un mayor consumo al inicio de la temporada de verano.