Aníbal Arbi Barrueto (60) no podía quedarse sentado a medio camino, en medio del frío y pasando hambre. Por eso ayer decidió empezar a caminar para llegar a su destino. Pero luego de recorrer 12 kilómetros se desplomó víctima de un paro cardíaco.El sexagenario permaneció cinco minutos sobre la Carretera Central sin que nadie le brindara ayuda, hasta que unos pobladores lo trasladaron en un triciclo al hospital de Chulec, donde los médicos informaron su deceso.Era cerca de las 10:30 a.m. y el primer día de paro de 48 horas convocado por el Concejo de La Oroya había cobrado su primera víctima. ¿El motivo? Demandar la ampliación del plazo para la aplicación del PAMA por parte de la minera Doe Run.Arbi Barrueto viajaba a Huánuco y había decidido caminar desde Chucchis, a 23 kilómetros de La Oroya, donde se encontraban apostados cientos de manifestantes. En la carretera solo había rocas, troncos y llantas quemadas. No contentos con ello, los manifestantes apedrearon carros y hasta a los pasajeros.Precisamente estos últimos tuvieron un enfrentamiento con los huelguistas cuando intentaron despejar parte de la vía. Cuatro de ellos recibieron impactos de pedradas en todo el cuerpo y la policía tuvo que emplear bombas lacrimógenas y disparar al aire para evitar mayores disturbios.El paro de ayer es sin duda el de mayor contundencia que se haya visto en La Oroya y también fue acatado por los trabajadores de la minera. Se calcula que unos 700 vehículos, entre ómnibus, autos y camiones de carga, están varados, al igual que por lo menos tres mil pasajeros.