NO PERDAMOS EL FOCO
17 de febrero de 2021

Anteayer, mientras el país procesaba que 487 personas se habían beneficiado clandestinamente con la vacuna del laboratorio chino Sinopharm y que la exministra de Salud Pilar Mazzetti nos había mentido tanto como el presidente Martín Vizcarra sobre la materia, el Ministerio de Salud reportaba 3.203 nuevos casos de COVID-19 y 177 nuevos fallecidos. Así, oficialmente, han muerto más de 43 mil peruanos durante toda la epidemia. Más de 300 son médicos. Lo grave de las cifras nos recuerda que las trapacerías de quienes, más que el hombro, le pusieron la espalda al país, no deben distraernos ni amenazar lo más importante de todo: derrotar la pandemia. Obviamente, será importante que se deje trabajar al sistema de justicia para castigar a quienes corresponda por sus fechorías, mentiras y traiciones; pero también lo será que se apuntalen las campañas por obtener y aplicar vacunas. Para ello, además de exigirle diligencia y efectividad al Ejecutivo, es clave demandar que nuestros políticos no gatillen mayor inestabilidad gratuitamente -algo que, lamentablemente, ya empezó a verse-.