Manos a la obra. Ese parece ser ahora el lema que tanto el Ejecutivo como el Poder Judicial (PJ) han asumido como propio para lograr que el pueblo del Perú cuente con un sistema de justicia eficiente y libre de corrupción. Ayer, luego de una reunión entre el Presidente de la República, Alan García Pérez, y el titular del Poder Judicial, Walter Vásquez Vejarano, en la que también participaron los miembros de la Sala Plena de la Corte Suprema, se coincidió en la necesidad de iniciar un proceso de reforma a fondo del Poder Judicial para eliminar, principalmente, la corrupción descubierta a raíz del caso del vocal supremo provisional Eduardo Palacios. "Nos declaramos en Sala Plena Permanente con el fin de reestructurar el Poder Judicial en la medida de nuestras posibilidades legales. No vamos a violentar el orden constitucional, respetaremos la estructura constitucional del estado de derecho", aseguró Vásquez Vejarano, quien dijo que ese proceso se inicia hoy.