DEBILIDAD INESPERADA
20 de enero de 2021

NORMATIVA. Por duodécimo año consecutivo, las agroexportaciones lideraron las exportaciones no tradicionales el 2020 y las cifras actualizadas hasta noviembre indican que su participación fue incluso mayor de la que alcanzaron el 2019 (46%). Y dentro de los embarques totales, representan alrededor del 15% y solo son superadas por los minerales metálicos, que tradicionalmente han sido el mayor soporte de la balanza comercial peruana.Todo parecía marchar sobre ruedas, hasta que en diciembre trabajadores agroexportadores tomaron la carretera Panamericana en Ica y La Libertad, e hicieron notar a la opinión pública que detrás del éxito del sector existían problemas laborales que no habían sido solucionados durante todo el tiempo del boom. El Congreso vio una oportunidad para su populismo y derogó la Ley de Promoción Agraria (LPA) y se apuró en aprobar un reemplazo que no dejó contento a nadie. Hay dos reglamentos pendientes: el de negociación colectiva, cuyo plazo venció el viernes 15, y el de la propia ley, cuyo plazo vence el 30.Una reciente encuesta de Ipsos muestra que la ciudadanía no anticipa consecuencias positivas. Dos tercios de los entrevistados consideran probable que las empresas reducirán personal por el incremento de costos que enfrentarán con la nueva ley, que incluye un bono de 30% -los trabajadores quieren que ese bono se incorpore al cálculo de su jornal, aunque las leyes no pueden fijar precios-, y que algunas empresas pasarán a la informalidad. Un porcentaje menor (64%) estima probable que se dejarán de exportar algunos productos porque sus costos serán mayores a los precios internacionales.