"No consagraré a ninguna vaca sagrada", advirtió ayer Gino Ríos Patio, el procurador que ha sido designado por el Gobierno para que investigue cualquier indicio de corrupción que hubieran cometido el ex presidente Alejandro Toledo, ministros, viceministros y otros altos funcionarios del pasado mandato.Afirmó que pondrá atención en seguir los casos de la fuga de Carmen Burga --por el tema de las firmas falsas de Perú Posible-- y el de la vinculación del ex asesor presidencial César Almeyda con Óscar Villanueva, el 'cajero' de Vladimiro Montesinos.Ante la prensa pidió que su labor no sea empañada por especulaciones y subjetividades, pues "en el Perú debemos acostumbrarnos a que todos somos iguales ante la ley y también ante quienes la aplican".También señaló que, si el ex presidente Toledo o su esposa Eliane Karp están involucrados en algún delito, no serán excluidos de ninguna investigación.(Edición sábado).