La pandemia del covid-19 impactó en forma negativa en los mercados, muchos países han visto reducir la demanda de sus productos; por lo tanto, los gobiernos del mundo están recurriendo a sus principales fortalezas para iniciar el reactivamiento de sus economías.En el Perú, la demanda interna, así como la inversión pública y privada han registrado caídas muy significativas. El turismo y la industria del entretenimiento volverán a recuperar sus niveles prepandemia en uno o dos años; la construcción y la pesca estacional podrán hacerlo en un período más corto.En consecuencia, la alternativa en la actualidad es optar por la minería con una visión de largo plazo, señala Guillermo Vidalón del Pino, comunicador especializado en temas mineros. El comercio internacional consume metales que son producidos en el país y que la evolución positiva de sus mercados se ha mantenido, no obstante la presencia del coronavirus.El mercado del cobre es de aproximadamente 24 millones de toneladas métricas anuales, 9 de ellos provienen de su reciclaje y los otros 15 millones de toneladas métricas de nueva producción. Los analistas de los mercados de minerales proyectan que el crecimiento anual de la demanda por cobre se expande en 2.5%, es decir, para cubrir esa demanda se requiere la producción de 600,000 toneladas adicionales cada año. Tengamos presente que el Perú es el segundo mayor productor de cobre del mundo, con 2.46 millones de toneladas métricas anuales, y, además, cuenta con reservas suficientes para poner en valor nueva producción, sea por la ampliación de las actuales operaciones, o por el desarrollo de nuevas unidades de producción.