Sigue trayendo cola. Los representantes de las empresas contratistas de la minera Yanacocha, Urteaga y CyM Conalvías, acusaron al párroco Marco Arana, la ONG Grufides y el partido de extrema izquierda Patria Roja de impulsar las protestas contra la minera en perjuicio de miles de trabajadores de Combayo, Cajamarca.El gerente de Operaciones del consorcio Urteaga Servicios Generales, que dota de maquinarias a Yanacocha, dijo que Arana es quien se entrometió en el diálogo entre la minera y los comuneros para "hacer abortar" toda forma de entendimiento.Remarcó que con el cierre del proyecto Carachugo se afectó el contrato de 150 empleados de Cajamarca, que son el sostén de sus propios hogares y quienes sufren las consecuencias de los reclamos exagerados del cura y la citada ONG, "financiada desde el extranjero para afectar la actividad de la empresa". "Están poniendo al gato de despensero al nombrar de mediador a Arana. ¿Acaso no recuerdan que él incentivó las protestas en el cerro Quilish?", dijo indignado. (Edición domingo).