LA RECONSTRUCCIÓN DESPUÉS DE LA GUERRA
23 de abril de 2020

Sin duda el episodio más traumático de la etapa republicana del Perú fue la Guerra del Pacífico. Desde un punto de vista político, humano, económico y hasta de idiosincrasia nacional no hay nada que se le acerque. En cuanto a la producción nacional, esta se redujo a la mitad entre 1878 y 1883. La construcción y la minería cayeron en casi 90% en ese período. La velocidad de la devastación del aparato productivo no tuvo precedentes ni sucedáneos en la historia peruana. Al país le tomó dos décadas y media recuperar los niveles de producción anteriores a la guerra, pero otras heridas tomaron aún más tiempo en cicatrizar.En su peor versión, hoy el país enfrenta una crisis que amenaza disputarles a la etapa más dura del primer período del presidente García (1987 a 1990) y a la Gran Depresión (1929 a 1932) el segundo o tercer lugar de gravedad, respectivamente, en la historia económica nacional. Los más recientes estimados para el Perú del Fondo Monetario Internacional (FMI) proyectan una reducción del PBI de este año de -4,5% y un rebote de 5,2% el siguiente, pero el escenario es aún sumamente incierto y podría girar para peor "mucho peor" en función de las características del virus y de lo que hagamos para controlarlo. No hay mucho espacio para errores. Lo que está en juego es todo.Pero la crisis, como toda crisis por más grave que esta sea, pasará. ¿Qué país tendremos entonces? Desde la esfera internacional, depende de la velocidad con la que se avance en los protocolos de salud y en la disponibilidad de pruebas confiables, en un tratamiento efectivo y, sobre todo, en una vacuna. Desde la esfera local, depende de las políticas que tengamos en lo inmediato para enfrentar la emergencia, y también de las que se apliquen para el período de reactivación, señala Diego Macera, gerente general del Instituto Peruano de Economía.