Es inocultable la decepción que causaron las cifras de crecimiento económico del año pasado en el país. Con un frente externo relativamente calmo -la excepción quizá fueron los ensayos de guerra comercial entre EE.UU. y China-, que el PBI haya logrado expandirse tan solo 2,2% fue una derrota económica y política para el actual gobierno.Aunque el mea culpa de parte de las autoridades haya sido exiguo, algunas señales en los últimos días apuntan a que la administración está tomando en serio el asunto para este año. Los números de expansión de la inversión pública de enero y febrero son altos: 53% mayores que el mismo período durante el 2019. Los tres niveles de gobierno contribuyeron con la expansión. El miércoles, la titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), María Antonieta Alva, advirtió que, en el contexto de las repercusiones económicas que traería el nuevo coronavirus, el Perú tenía espacio fiscal suficiente para acelerar la inversión pública y reducir los impactos de la enfermedad.