Los precios del oro saltaron ayer a su mayor nivel en una semana, después de que una fuerte alza de casos de coronavirus en China renovó el temor a un impacto económico global y persuadió a los inversionistas de buscar activos de menor riesgo. La provincia china en el epicentro del brote reportó un aumento récord del número de muertos, así como miles de infectados más, como resultado de un nuevo método de diagnóstico, mientras que Japón se convirtió en el tercer lugar fuera de China continental donde fallece una persona. El oro al contado operó con un alza de 0.7% a US$ 1,576.32 la onza, luego de haber tocado previamente su mayor nivel desde el 4 de febrero de US$ 1,577.81 la onza. En tanto, los futuros del oro en EE.UU. terminaron la jornada con un avance de 0.5% a US$ 1,578.80 la onza.
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