Después de 10 años de iniciado el proceso concursal a Doe Run Perú, la junta de acreedores –la cual encabeza el gobierno–halló una fórmula que dejará en manos de los trabajadores uno de los principales activos de la empresa, el Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO). Ayer en junta de acreedores se aprobó transferir todos los activos de la empresa en La Oroya, incluyendo el CMLO. Para ello se conformará una nueva sociedad (Nueva La Oroya S.A.) cuyas acciones serán entregadas a todos los acreedores laborales, es decir, los trabajadores.