Con autorización del accionista mayoritario del Grupo Odebrecht, el holding concluyó que la mejor manera de afrontar la crisis financiera era solicitar apegarse a la ley de quiebras de la justicia de Brasil. De esta manera, presentó ayer un pedido de recuperación judicial para varias de sus empresas, "para posibilitar la conclusión con éxito del proceso de reestructuración financiera de forma coordinada".En este contexto, Odebrecht explicó a El Comercio que los activos que mantiene en el Perú no serán afectados por dicha situación.