A través de un comunicado, la empresa minera MMG condenó los actos de violencia en Challhuahuacho y Yavi Yavi e informó que el conflicto en Las Bambas perjudica la labor de ocho mil colaboradores. Además, defendieron las modificaciones al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) realizados en el 2014 y que repercutieron en que el cobre ya no sea trasladado con un mineroducto, desde Apurímac al Cusco, sino con camiones a través de la carretera no asfaltada en el fundo Yavi Yavi. "El cambio del proceso de transporte del mineral fue un requerimiento técnico para la independización de ambos proyectos, para lo cual se realizó una modificatoria en el EIA, que siguió todos los procesos de ley. Esta modificación fue ejecutada antes de que Las Bambas fuera vendida por Glencore (empresa suiza) al consorcio liderado por MMG", dijo la compañía. (Edición sábado).