PBI. Desde finales del 2017, la economía peruana está mostrando un comportamiento peculiar: cuatro meses consecutivos de enfriamiento (noviembre-febrero, junio-setiembre), seguidos de tres meses consecutivos de recuperación (marzo-mayo, octubre-diciembre). A enero último le "tocó" un PBI enfriado (1.58%), explicado por la caída de tres sectores clave: minería, que cumplió su cuarto mes consecutivo a la baja; pesca, por la menor captura de anchoveta, lo que a su vez afectó el desempeño de la manufactura.Este sector estaba creciendo ininterrumpidamente desde marzo del 2018, impulsado por la reactivación de su componente no primario, que a pesar que también creció en enero, no fue suficiente para contrarrestar la contracción del componente primario -ocasionada por la menor producción de harina y aceite de pescado-. Cabe recordar que manufactura fue la actividad con la mayor contribución al PBI total del año pasado.