El arbitraje se ha convertido en un mecanismo de enriquecimiento ilícito por parte de empresarios inescrupulosos que buscan aumentar los montos originales de las obras públicas, como sucedió con Odebrecht, una práctica que se ha difundido como una epidemia.Un estudio de la Contraloría General de la República estima que 867 obras públicas en todo el territorio nacional están afectadas por los procesos arbitrales, y que de esa totalidad, estos ocasionan la paralización de la ejecución de 191 proyectos, cuya inversión se estima en 4 mil 693 millones de soles.(Edición domingo).