Lanza advertencia. Ya está claro que el presidente Alan García no se andará con medias tintas. Ayer aseguró que durante su gobierno se prescindirá de los servicios de cualquier empleado público que tenga un proceso judicial o administrativo pendiente, o de aquellos que hayan participado en algún escándalo. Fue al referirse al caso del ex viceministro de Construcción y Saneamiento, Carlos Arana -cesado de su cargo dos días después de haber sido nombrado-, debido a que el Consejo Superior de Contrataciones y Adquisiciones del Estado (Consucode) estaría a punto de denunciarlo penalmente. "Cualquier persona que sea nombrada ministro, viceministro, director o embajador, etcétera, si se demuestra que tiene escándalos o procesos, a pesar de su buena voluntad, será cesado", expresó en una conferencia de prensa que ofreció al llegar a la ciudad de Tacna.(Edición domingo).