Los gastos que originaba el avión presidencial fueron una crítica constante durante el gobierno de Alejandro Toledo. Su sucesor, Alan García, parece que sí tiene intenciones de cumplir lo que ofreció en su discurso del 28 de julio: no más frivolidades.Es por esta razón que decidió no usar el avión presidencial. Al menos no lo hará este lunes 7 de agosto para acudir a la ceremonia de juramentación del presidente Álvaro Uribe en Bogotá, Colombia.Ayer El Comercio confirmó que el presidente ha tomado la iniciativa de viajar a esa ciudad en un vuelo comercial y solo irá acompañado por su canciller, el embajador José Antonio García Belaunde. Ni siquiera su esposa, Pilar Nores, será de la partida. Se agregó que el gasto que este desplazamiento origine al Estado, solo será el de los pasajes porque García, según lo planeado, regresará esa misma noche a Lima. Según lo previsto, partirá a las seis de la mañana y retornará alrededor de la medianoche del martes 8 de agosto.