Jair Bolsonaro, el candidato de extrema derecha y favorito para ganar la elección presidencial de Brasil, podría revisar el modelo de contratos de producción compartida de los campos petroleros en áreas presal del país si gana los comicios, reportó ayer el diario local Valor. Bolsonaro además podría terminar con el financiamiento entregado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) para obras en el exterior, agregó Valor, que citó a fuentes no identificadas de la campaña. Por mucho tiempo, el diputado abogó por el control estatal en activos estratégicos como los de Petrobras y Eletrobras, pero últimamente ha mostrado una estrategia distinta, más cercana a la de asesores que están por la privatización de esos activos.