En las últimas cinco semanas, el cobre redujo en 15% su cotización a raíz de la guerra de aranceles desatada por Estados Unidos. Que la industria de China, el principal socio comercial del Perú, pague más por sus insumos hace que los agentes del mercado presuman una menor demanda de productos que China compra en abundancia, como el cobre. Para el Perú, segundo productor mundial de cobre del mundo, la menor cotización se traduciría en menos exportación y recaudación de lo previsto.Según César Fuentes, director de la maestría en Gestión Pública de la Universidad ESAN, entre junio y julio de este año el cobre ha pasado de $3.32 la libra a $2.82, y el impacto del precio dependerá de la antelación con que las mineras hayan vendido su producción. "Si han actuado de manera previsora, y han vendido gran parte de su producción a precios que estaban más altos hasta este año... Si eso es cierto, el efecto lo veremos en el 2019", indicó. De ser el caso, Fuentes calcula que el impacto sería de $2 mil millones menos en exportaciones en el 2019; pero si se negocia a precios actuales, la pérdida se sentiría desde el tercer trimestre de este año. Por lo tanto, Perú no exportaría los $52 mil millones previstos por el Banco Central de Reserva, sino $50 mil millones. "En recaudación, serían unos $300 a $400 millones menos", estimó.Sin embargo, Pablo de la Flor, gerente general de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), consideró que esta caída es una "corrección" a un precio alto a inicios de año. "En la primera parte del año, los precios fueron buenos, y estosprecios pueden volver a darse si los ánimos se calman", declaró a Correo. Comentó que las mineras que operan en el país manejan contratos a largo plazo y que si bien los precios spot tienen cierto impacto, "aún con todo han sido buenos"; además, su situación financiera puede resistir precios bajos."Lo que tenemos ahora es una situación positiva de los balances. La expectativa es que no se sigan exacerbando los ánimos", refirió
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