El petróleo cayó ayer por tercer día consecutivo por el crecimiento de los inventarios estadounidenses y una menor preocupación ante la posibilidad de que la violencia entre el grupo Hezbolá e Israel se extienda hacia productores de crudo de la región.El crudo para entrega en agosto cerró con una baja de 88 centavos, a US$72,66 el barril, extendiendo una caída de más de un 7% desde el récord de US$78,40 registrado el viernes pasado. La caída empezó cuando se supo que los inventarios de gasolina de EE.UU. crecieron en 1,5 millones de barriles, mientras que las existencias totales de crudo aumentaron en 200.000 barriles. Analistas esperaban que las existencias de gasolina cayeran en 700.000 barriles. En los inventarios de crudo estimaron un declive de medio millón de barriles.