Desde que el Perú adoptó el modelo de economía social de mercado, un motor clave en el crecimiento del PBI ha sido la inversión privada.Sin embargo, entre el 2014 y el 2016, sufrió contracciones y, como consecuencia, se desaceleró el ritmo de crecimiento de la actividad económica. En el 2017, la inversión privada apenas aumentó 0,3%, pero este año todos los pronósticos apuntan a que el otrora motor de dinamismo volverá a acelerar. Durante el primer trimestre, la variable anotó un crecimiento de 5,3% y, entre abril y junio, se habría acelerado a una tasa superior al 6%. Algunos datos que anticipan el comportamiento de la inversión privada justifican esta expectativa.Por ejemplo, según cifras del Banco Central de Reserva, entre abril y mayo la importación de bienes de capital ha crecido 10,2%. El consumo interno de cemento ha aumentado 8,3% y el crédito al sector privado se expande a 8,2%.A la luz de estas cifras, la consultora Thorne & Associates señala que, entre abril y mayo, el crecimiento de la inversión privada estaría alrededor de 7%. La inversión minera juega un papel protagónico y habría crecido cerca de 50%.