La expectativa de llevar el gas de Camisea a 1 millón de hogares limeños en el 2021 no llegaría a cristalizarse. Día1 supo que el distribuidor de este hidrocarburo para Lima y Callao, Cálidda, ha decidido recortar sustantivamente sus inversiones en conexiones domiciliarias de gas por los próximos cinco años. ¿Por qué razón?Días atrás, la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) advirtió que la masificación del consumo de gas natural en Lima y Callao estaba "en riesgo de sufrir retrasos" debido a cambios normativos que desalientan la inversión. En particular, señaló el efecto negativo del D.S. 017- 2015-EM, que establece que los planes quinquenales de inversión de los concesionarios de gas deben ser cumplidos de manera forzosa y no referencial, como ocurría hasta el 2015. En la práctica, esto significa que si el distribuidor de gas no ejecuta al pie de la letra las obras de conexión especificadas en su plan quinquenal, será multada. Según Osinergmin, Cálidda incumplió su compromiso de ejecutar obras en ciertas zonas de Ventanilla, Puente Piedra, San Martín, Callao, Santa Anita, Ate, San Juan de Lurigancho y Chorrillos, entre otros lugares, en 2014-2017. Por tal motivo, le impuso multas por US$35,1 millones, cifra que representa el 10% de sus inversiones quinquenales. Cálidda señala, empero, que sus planes quinquenales solo pueden cumplirse en un 80% por diversos motivos."Por ejemplo, si se asfalta una pista no podemos ingresar por allí. Tampoco podemos ingresar cuando una municipalidad nos exige un pago indebido (coima) o cuando alguna entidad del Estado nos niega un permiso", explica Jorge Olazábal, gerente general de la firma distribuidora. Apunta que cada vez que Cálidda no pudo ingresar a una zona, compensó ese traspié con otra obra en un área de características similares