Para el gerente de Estudios Económicos del Banco Central de Reserva (BCR), Jorge Estrella, el incremento del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) al diésel tiene un impacto poco significativo en el precio final de este combustible. Por lo tanto, no se justifica que se incrementen las tarifas del transporte de carga. Es decir, el precio de los alimentos no tendría que subir por dicho concepto.En la teleconferencia que ofreció sobre el Programa Monetario de Mayo 2018, señaló que el impacto de un mayor ISC al diésel es de 4% más en el precio final.Encarecer el transporte de carga implicará incrementar los precios de los productos, principalmente de los alimentos perecibles.Estrella dijo también que el mayor ISC a otros combustibles, así como a bebidas azucaradas, tendrá un impacto de entre 0.2% y 0.3%, pero solo una vez y sería entre mayo y parte de junio.(Edición sábado).