La Ley de Modernización de Petroperú fue aprobada pero ya tiene sus primeras críticas. Róger Arévalo, presidente del directorio de la empresa estatal, recomendó revisar el rol de la Contraloría General de la República dentro del control interno de la petrolera, el cual debe recaer bajo la responsabilidad de los directores.Arévalo expresó su desacuerdo con que el Sistema Nacional de Control designe a un empleado de la Contraloría como jefe interno de control en Petroperú, quien a veces por no contar con experiencia, emite un informe con una supuesta irregularidad que puede ocasionar procesos penales. "De ahí vienen los famosos escándalos en Petroperú", refirió.Precisó que la ley que moderniza Petroperú no elimina los controles sino la interferencia y los obstáculos (Fonafe y SNIP). "Fonafe y el SNIP no son un control, son una intervención en la gestión. El Consucode como estaba significaba una interferencia, no permitía ni siquiera hacer mantenimiento", anotó.(Edición sábado).