Alan García dejó su habitual oficina de San Isidro para trasladarse anoche, de forma sorpresiva, hasta la casa de la ex candidata por Unidad Nacional (UN) Lourdes Flores Nano en San Borja.A su salida, luego de una conversación que duró poco más de una hora, el presidente electo descartó por completo que haya ofrecido a Flores un puesto en su Gabinete Ministerial."Hemos charlado solo sobre la situación política actual", dijo.García contó a la prensa que durante la conversación habían encontrado muchas coincidencias en diversos aspectos, tanto en política internacional como en asuntos internos."Vine a pedirle ideas porque siempre he dicho que la señorita Flores es una mujer muy inteligente", remató.García también señaló que tras el diálogo ha llegado a la conclusión de que UN formaría parte de una oposición sensata y con objetivos políticos claros.