En el mercado de comercialización mayorista de combustibles de Pucallpa están presentes, por un lado Maple, empresa administradora de la refinería de Pucallpa, y por otro, la petrolera estatal Petroperú.Pucallpa es una ciudad en donde prospera el comercio y que, sin duda, requiere de energía para su desarrollo. Por ello, llamó la atención que desde inicios de este mes circule información en la que se daba cuenta de problemas con el oportuno abastecimiento por la paralización de la refinería de Pucallpa.Medios locales indicaron que esto generaría desabastecimiento de gasolina de 90 octanos y diésel B5.En 1993, con la privatización parcial de Petroperú, se transfirió a Maple (hoy Petróleos de la Selva) el Proyecto Integral Aguaytía compuesto por los Lotes 31B, 31D y 31C (hoy operado por Orazul), la Refinería Pucallpa y una planta de ventas.La refinería de Pucallpa desde un inicio era provista por el crudo de sus propios lotes y de la venta de crudo por parte de Aguaytía Energy.Gustavo Navarro, gerente comercial de Petroperú, indicó a La República que el problema radica en que pasaron 20 años desde el contrato original y Maple consumió gran parte de las reservas que recibió de la estatal y no las repuso."Pasó el tiempo y la producción empezó a declinar, y es allí cuando Petroperú ingresó a este mercado", aclaró.Petroperú dice, además, que en 2002, en atención a la demanda de combustibles en la región Ucayali, habilitó una planta de ventas sobre una infraestructura de su propiedad.