En entrevista con Gestión, la viceministra de Energía, Ángela Grossheim, salió al frente de las críticas que hacen las empresas eléctricas al DS 343- 2017 que dictó el MEM en el sentido de que no resuelve las distorsiones en el mercado eléctrico. Grossheim aseguró que dicha norma es solo una de diversas medidas que está estudiando ese sector, junto a otras entidades públicas, para lograr la meta final, que es que la tarifa no suba más para los usuarios regulados. Vale recordar que el citado decreto supremo establece un nuevo esquema de declaración de los precios del gas natural para la generación térmica, y determina una fórmula que evita que las térmicas sigan declarando costo cero en el uso del citado combustible, pues esto es considerado como una de las principales distorsiones en el mercado eléctrico.El cuestionamiento de parte de un sector de empresas eléctricas, entre distribuidoras y generadoras, apuntaba a que al establecer el MEM un precio piso mínimo para declarar el gas, se mantenía el incentivo para seguir subdeclarando ese precio e imponer un precio irrealmente bajo en la compra de la energía en el mercado libre. Al respecto, la viceministra Grossheim subrayó que con esta norma no se está buscando favorecer a ninguna empresa, y que si existe un precio bajo en el mercado de corto plazo o spot (se habla de US$ 10 en promedio por MW.h), se debe a que persiste la conocida sobreoferta en la capacidad de generación eléctrica en el país. Además, afirmó que el Gobierno no puede entrar al mercado a definir en forma arbitraria, mediante una norma, cuál es el costo marginal (precio de la energía en el mercado de corto plazo), pues este lo determinan la oferta y la demanda.