Mientras el Apra sigue hablando de las "bombas de tiempo" que recibirá, tanto en tarifas de servicios públicos como en el tamaño de la planilla estatal, ayer en el pleno del Congreso se frustró nuevamente la aprobación de la Ley General del Empleo Público.¿La razón? La misma de hace varios meses: no hubo el quórum necesario para aprobar una ley que requiere 61 votos favorables. Una vez más, la bancada aprista no estuvo completa en el hemiciclo, tal como ha ocurrido repetidas veces en las sesiones plenarias de los últimos meses, salvo por aquella en que se aprobó el TLC. "Es una contradicción --sostuvo el congresista de Perú Posible Carlos Ferrero-- que los apristas no quieran discutir un dictamen que está listo hace varios meses y que precisamente ordena el aparato estatal". Y más aún, esta Ley del Empleo Público activa también la ley de remuneraciones del Estado. Al respecto, el jefe del plan económico aprista Enrique Cornejo manifestó que la responsabilidad recae en la Mesa Directiva. "Ya no se trata de bancadas, es la presidencia del Congreso la que tiene que definir la agenda y poner el dictamen al voto", indicó.