El gobierno de Alejandro Toledo deja en el Ministerio de Energía y Minas una "bomba de tiempo" ante su poca capacidad para solucionar más de treinta conflictos mineros a lo largo del país.Así lo afirmó el encargado de coordinar la transferencia en dicho sector por el Partido Aprista Peruano, Pedro Gamio."Si entendemos como bombas de tiempo los problemas que existen y no han sido solucionados, definitivamente se encuentran en los conflictos mineros sin resolver en distintos lugares", señaló el delegado aprista. Advirtió que una eventual crisis social amenazaría la inversión en minería de $10 mil millones.