El Fondo de Adelanto Social, que empezará a operar en el 2018, no se destinará a realizar obras con el fin de atender conflictos sociales existentes en torno a los proyectos mineros, advirtió el viceministro de Minas, Ricardo Labó. Remarcó que ese fondo tendrá un enfoque totalmente preventivo, y que no se destinará a las zonas que reclaman más, sino que acompañará al desarrollo de aquellos proyectos que cuenten con una etapa cercana a la factibilidad, que tienen cierta seguridad que van a ser realizados, y que cumplen con condiciones económicas y ambientales mínimas para poder asegurar su ejecución."Esto no es para proyectos muy incipientes, tampoco para operaciones, porque las comunidades o distritos aledaños a las operaciones ya reciben beneficios por otras formas, sea regalías o canon minero", precisó.
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