Los mejores precios del oro y la plata motivan que Hochschild retome sus planes de crecimiento, pero esta vez sin Crespo (US$111 millones), proyecto paralizado hace tres años debido a la crisis minera. Hasta el 2014, la peruana apostaba por el tándem Inmaculada-Crespo para crecer orgánicamente, pero la caída de los precios de los metales la obligó a diferir la construcción del segundo, pese a haber adelantado más de US$20 millones de inversión.El reciente ‘rally’ del oro y la plata no la convencen de retomarlo."Crespo es un proyecto que sigue siendo rentable, pero que queda chico para la compañía, dados nuestros volúmenes actuales. Si entrara en producción representaría el 7% del total. Por eso, creemos que los US$90 millones que faltan por invertir podrían ser priorizados en otras alternativas", explica Ignacio Bustamante, CEO de Hochschild.