Después que Odebrecht afirmara que los otros dos accionistas del consorcio Gasoducto Sur Peruano no asisten a las reuniones de directorio, fuentes de Graña y Montero sostuvieron que esto se debe a que la empresa brasileña busca discutir sus propios intereses y no los de la sociedad."Un claro ejemplo de ello es que se ha negado a discutir la transferencia de los activos al Estado peruano, condicionando dicha transferencia a beneficios particulares de Odebrecht, lo cual es inaceptable", según fuentes de Graña y Montero.