La relación que debe existir entre la rentabilidad de las empresas mineras y el bienestar de la población es un tema que preocupa a diversos sectores. Como nunca antes, los ingresos por la explotación de metales han crecido exponencialmente, lo que abre una oportunidad a los departamentos mineros para lograr el ansiado desarrollo.A diferencia de otras regiones, Junín no recibe ingresos millonarios por concepto de canon minero. De acuerdo con el Presupuesto inicial del Sector Público de 2006, este departamento recibirá 8 millones 758 mil 755 nuevos soles. El monto se incrementa a más de 23 millones por otros cánones (hidroenergético).Sin embargo, esta cifra es menor a lo que recibirán, por ejemplo, el distrito cusqueño de Echarate (más de 45 millones de nuevos soles por canon del gas) o el municipio provincial de Cajamarca (más de 49 millones).Otro panorama. Toromocho es la esperanza de Junín. Los estudios realizados indican que su explotación demandará una inversión de 1,500 millones de dólares. Las reservas de este proyecto minero se calculan en 1,857 millones de toneladas métricas de cobre, plata y molibdeno, entre otros metales, señala la consultora Independent Minino Consultans (IMC).Con esta reserva se podría extraer un promedio de 150 mil toneladas de mineral al día, lo que constituye un récord. Si sumamos la producción de las minas Toquepala y Cuajone llegan sólo a 135 mil toneladas al día.(Edición domingo).