En el Perú, la minería es, sin duda, el sector que causa más debate en torno a su importancia y su aporte al desarrollo económico y social del país. Entre los argumentos más conocidos, uno de los que suelen utilizar sus detractores es que genera reducido valor agregado.Así, muchas veces se arguye que la minería no genera valor agregado puesto que únicamente involucra "extraer piedras y venderlas", y que para generarlo es crucial tener una industria refinadora o procesos posteriores. Sin embargo, según el último estudio elaborado por el Instituto Peruano de Economía (IPE), son en realidad las fases de exploración y explotación minera las que generarían mayor valor agregado en la economía. En primer lugar, es necesario definir qué se entiende como valor agregado. En economía, el valor agregado hace referencia a la diferencia que existe entre el valor de los insumos necesarios para producir algo y el valor del producto final. Esta diferencia, llamada valor agregado, es consecuencia de un proceso productivo que utiliza y transforma los insumos. Por ejemplo, restaurantes que adquieren insumos como pescado, limón, cebolla y otros ingredientes, que llegan a costar S/15 en total, pueden producir platos de ceviche cuyo precio puede alcanzar los S/25, generando así un valor agregado de S/10.En la minería, el valor agregado se genera al convertir minerales dispersos e imperceptibles en la tierra en concentrados de minerales con valor comercial. Pero estos concentrados son heterogéneos y con pureza distinta. Dependiendo de las características geológicas, pueden contener más minerales pagables o algunos penalizables.