Una turba de contrabandistas y pandilleros atacó ayer en la madrugada el complejo aduanero de Carpitas con la finalidad de recuperar un importante lote de galones de combustible que había sido decomisado en días anteriores.Según fuentes policiales, el asalto al puesto de control, ubicado en el kilómetro 1.181 de la carretera Panamericana Norte, se produjo a las 4 a.m., cuando cerca de 150 personas llegaron en unos 30 vehículos y atacaron con piedras y palos las instalaciones del organismo de control. Ante la superioridad numérica y la violencia de los atacantes, los diez custodios que estaban en el lugar, entre policías y aduaneros, optaron por replegarse.Tras destrozar las puertas y ventanas de la sede aduanera y romper los candados, los contrabandistas consiguieron llevarse un número no determinado de galones de combustible. Trascendió que la cifra superaría los dos mil galones. Aunque personal de Aduanas no quiso brindar información precisa , el cálculo se basa en que horas antes del ataque, a la 1 a.m. del jueves, la policía había decomisado 600 galones de petróleo. Estos se añaden a los 1.143 galones intervenidos la mañana del martes en una embarcación en la zona de Puerto Pizarro. Todo ese combustible, sumado al incautado en otras zonas de la región, se encontraba almacenado en Carpitas.