Entrevista a Waldo Mendoza, presidente del Consejo Fiscal.¿Se han sincerado lo suficiente? En el corto plazo, reducir la proyección de crecimiento económico en 1,8 puntos porcentuales no es menor. Sin embargo la proyección sigue un poquito inflada, por lo menos con respecto a las encuestas de expectativas del BCR. Hay mucho entusiasmo en el Ejecutivo de que la inversión pública pueda dar un salto en la segunda mitad del año, pero la caída de este indicador en 12% en el primer trimestre hace casi imposible el alza esperada de 15%. Seguramente la economía crecerá menos de lo que espera el Gobierno. ¿Y en cuanto a las proyecciones del 2019 en adelante? Allí están los problemas más sustantivos. Las cifras a mediano plazo nos parecen inconsistentes. El crecimiento potencial estimado hoy por el MEF es mayor al de agosto, antes de Odebrecht y de El Niño costero. La proyección de crecimiento de 5% del bicentenario la han traído al 2019. ¿Estamos peor hoy que en agosto en términos de potencial de crecimiento? Cuando el Gobierno hablaba el año pasado de crecer 5% en el 2021, ello respondía a dos factores. Primero, crecería el stock de capital sustantivamente gracias al destrabe de grandes proyectos. Eran US$18.000 millones en proyectos por destrabar. Segundo, las políticas de formalización iban a generar grandes ganancias de productividad. Pero hay un enredo en las proyecciones oficiales de formalización: el plan de gobierno de PPK hablaba de bajar la informalidad en 20 puntos porcentuales, luego el ministro de Economía ha hablado de 10 puntos y esta semana el ministro de Trabajo, Alfonso Grados, ha vuelto a decir que son 20 puntos. Bajar la informalidad en 20 puntos no ha pasado en ninguna parte del mundo, debe ser un error de tipeo. (Edición domingo).