Una vez en la Presidencia de la República, Alan García no debe tratar de inventar la pólvora y buscar convertirse en otro presidente fundacional en Latinoamérica, porque volvería a cometer el error de creerse el "prohombre de la patria", rehacer todo y borrar lo que hizo el mandatario anterior.Esa es la opinión del analista político internacional Andrés Oppenheimer, quien dijo a Correo que afortunadamente, por lo que ha escuchado, García no está criticando todo lo que hizo el gobierno de Alejandro Toledo. "Esa es una buena señal, ojalá se mantenga en eso", dijo.El escritor, que estuvo en Lima por dos días invitado por el Colegio de Ingenieros del Perú (CIP), señaló que García debería imitar el modelo de Chile, que es el que más éxito está teniendo en la reducción de la pobreza, seguido de Brasil. En ambos casos, expresó, los presidentes electos mantuvieron el rumbo de las políticas económicas establecidas. (Edición domingo).