Entrevista a Giselle Huamaní, adjunta de Conflictos Sociales en la Defensoría del Pueblo.¿Cuál será su línea de trabajo? Buscamos fortalecer los temas de conflictos, pero ampliando el monitoreo en los espacios de prevención. Aquí es donde la problemática recién aparece, en la cual hay una serie de fallas o desafíos para la misma institucionalidad encargada de resolver.¿Qué tipo de fallas? A veces los procesos no son facilitados adecuadamente o hay falta de recursos. También suele pasar que uno de los actores va con muchas cargas y pedidos y no logran ponerse de acuerdo sobre la problemática. ¿Es correcto decir que esta es la etapa latente? Exactamente. El otro aspecto que tenemos en este enfoque es trabajar en las condiciones previas, es decir, cuando hablamos de un proceso de diálogo (...) Actualmente en el país los procesos invierten poco tiempo en recoger la información técnica, en capacitar a los actores en manejar dicha información y actitudes propositivas para el diálogo.