El sostenido declive del valor de las acciones de la constructora Graña y Montero la ha afectado gravemente, tanto, que ayer, en la víspera de una junta general extraordinaria de accionistas, se han producido importantes renuncias (ver nota aparte). Por eso, se espera que hoy la empresa brinde explicaciones sobre su supuesta implicancia en pagos irregulares realizados por su socia Odebrecht y además informe las medidas que tomarán para superar la crisis.Desde el viernes, las cotizaciones de Graña y Montero no han dejado de caer (ayer cerró con -25%) y parece inminente la demanda de seis firmas de abogados estadounidenses por la posible afectación a sus intereses debido a la caída bursátil de la compañía peruana.El problema es que las Administradoras de Fondo de Pensiones-AFP tienen una inversión de 1,322 millones de soles en Graña y Montero y consideran que la junta de accionistas de la constructora permitirá que explique cómo llegó a esta crisis y qué medidas afrontará para superarla.El Gerente General de AFP Integra, Aldo Ferrini, dijo que la junta de accionistas se vuelve más relevante tras la declaración del colaborador eficaz, Jorge Barata, quien declaró que GyM conocía de los pagos irregulares que realizaba su asociada Odebrecht."Aún no hay una decisión tomada, pero después de la reunión sabremos qué camino seguir. El objetivo principal es preservar y dar mayor valor a los afiliados, que no se verán afectados porque las acciones de las AFP en GyM representa menos del 1% de los fondos invertidos. Como AFP vamos a cumplir nuestro rol a cabalidad, pero también a exigir las explicaciones del caso. Es una obligación, pero también es un derecho que tenemos como accionistas",acotó.