Finalmente los equipos técnicos del Apra y de UPP midieron sus fuerzas en el llamado debate programático del último domingo que, como se había establecido, debía servir para plantear las principales propuestas de gobierno.Fue positivo que, respecto al debate presidencial, en esta ocasión se hayan puesto sobre la mesa las medidas que, de llegar a la presidencia, desarrollaría García y Humala. En el campo de la economía y la generación de empleo salieron a luz algunas salidas ya conocidas, pero también otras no difundidas. Lamentablemente, faltó profundizar en otros ámbitos también importantes, como son los referidos a la infraestructura pública, las políticas sociales y la educación. En este sentido, el debate no colmó las expectativas de una audiencia que esperaba más propuestas fundamentadas y no solamente la enumeración de una lista de temas. La presentación duró una hora y media, tiempo sin duda corto para explicar cada asunto en profundidad. No obstante, hubiera sido estupendo que los técnicos abordaran con mayor amplitud cómo planean cumplir sus potenciales políticas públicas. La deficiente fundamentación y de comunicación para explicar las propuestas restó, pues, prestancia al debate.Hoy queda demostrado que este encuentro debió encargarse a una institución especializada, que sometiera a los candidatos al escrutinio de expertos y de la prensa independientes.