El caso de los comuneros de Huisa y Alto Huancané, de la provincia cusqueña de Espinar, ha logrado avanzar hacia su esclarecimiento. Los pobladores fueron contaminados hasta con 17 metales pesados, según el examen aplicado por el Centro Nacional de Salud Ocupacional y Protección del Ambiente Para la Salud (Censopas), en 2013, y cuyos resultados fueron ocultados a las víctimas.La ministra de Salud, Patricia García, derivó la denuncia de los espinarenses y los descargos de Censopas al contralor de la República, Edgar Alarcón, para que investigue y audite el caso.El Ministerio Público también indaga el hecho en Lima. Inicialmente, la acusación fue presentada en Espinar.Ahí el fiscal se inhibió y se declaró incompetente al considerarlo un caso complejo y lo envió a la fiscalía del Cusco.