Casos como el de Las Bambas, un muerto, o el de los constantes derrames de petróleo del Oleoducto Nor Peruano, en pésimo estado, en la Amazonía, demostraron que el gobierno ha actuado de manera reactiva en las materias de medio ambiente y conflictos sociales.Según especialistas consultados, más han sido los errores, pero todos coinciden en que también hubo aciertos como en el caso de Saramurillo donde finalmente pobladores y el Ejecutivo lograron acuerdos importantes. Para el exviceministro del Ambiente José de Echave, se subestimó el tema de la conflictividad social y prueba de ello es que el plan de gobierno de PPK solo dedicó media página al tema.En esta línea, recordó que durante los primeros meses la Oficina Nacional de Diálogo y Sostenibilidad (ONDS) de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) estuvo prácticamente acéfala.