Se tienen las fechas, las bases para la venta, pero no se tiene el precio. Esta es la situación de Doe Run Perú (DRP) sobre la subasta de sus activos: el Complejo Metalúrgico de La Oroya y la Unidad Minera Cobriza.La Junta de Acreedores, en sesión realizada el pasado viernes 16 de diciembre, optó por postergar una vez más la decisión sobre el precio base con el que comenzará la primera subasta programada para el 10 de marzo.Es así que el 3 de febrero recién se conocería el valor de los activos. Como se recuerda, para lograr consenso en este punto se debe lograr más del 50% de los votos dentro de la Junta de Acreedores. Los votos del Ministerio de Energía y Minas, Cormin y Coprim Ingenierías (MEM) y de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat) lograrían este porcentaje. Sin embargo, este último no ha mostrado el apoyo necesario para lograr consenso. Los trabajadores de DRP, ante tal situación, mostraron su malestar por la posición de la Sunat en este proceso.Sostienen que la posición de dicha entidad podría convertirse en una traba para el ingreso de la inversión, poniendo en riesgo la reactivación del Complejo Metalúrgico. Según informaron, la falta de inversión ya hizo que la producción que genera la mina Cobriza baje de 8 mil Toneladas Métricas (TM) mensuales a 4.500 TM.