Para mediados de diciembre estaría programada una nueva reunión de junta de acreedores de Doe Run Perú, (DRP) después de que el pasado miércoles 16 de noviembre no se llegara a un acuerdo concreto respecto a la valorización del complejo metalúrgico de La Oroya (Junín) y la mina de cobre Cobriza (Huancavelica). Los principales acreedores de la empresa metalúrgica plantearon "valoraciones conservadoras y optimistas" sobre los activos de Doe Run Perú. La falta de consenso no logró que se definiera un precio base y el consecuente lanzamiento de la subasta internacional. Se supo que el acreedor vinculado a Grupo Renco (expropietario de Doe Run Perú) propuso que la subasta se lance en marzo del 2017, después de que una comisión creada por el Ministerio del Ambiente presente resultados sobre estándares ambientales de aire, lo cual fue cuestionado por los demás acreedores.
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